Historia
El Museo Interactivo del Queso está ubicado en Colonia Médici, un paraje ubicado en el sur de la provincia de Santa Fe que fue fundado en 1891 por Ángel Médici, un inmigrante suizo. Al igual que otras colonias agrícolas, surgidas a partir de mediados de siglo XIX, fue testigo de una época en la cual la ruralidad se presentaba como un espacio de encuentro entre criollos e inmigrantes que fueron dando lugar a tradiciones y modos productivos que hoy constituyen parte de la identidad santafesina.
La vida social en esta colonia transcurría entre el boliche, lugar de encuentro de peones y gringos que se reunían con ánimo de desafiarse mediante una partida de naipes; el almacén de ramos generales, espacio que ofrecía la posibilidad de dotarse de todo tipo de insumos; la parroquia María Auxiliadora, erigida gracias a donaciones realizadas por los parroquianos de la zona; la escuela y el club La Suiza.
La actividad productiva, asociada principalmente al cultivo de trigo y maíz a la actividad láctea, requería mucha mano de obra. En tiempos de cosecha se duplicaba la cantidad de trabajadores. El ordeñe manual y el funcionamiento de varias cremerías y fábricas de queso, entre ellas La Marta, generó durante varias décadas un importante entramado social.
A partir de los 70´, el ámbito rural comenzó a cambiar. Los avances tecnológicos, las reiteradas crisis económicas, la agriculturización y la falta de políticas públicas que promovieran el desarrollo territorial provocaron el despoblamiento de la zona y dieron lugar a un período de abandono y olvido. Las taperas se apropiaron del paisaje.
En el año 2000, la idea de desarrollo cultural, asociada a generar procesos que afirmen y enriquezcan las identidades culturales, es abrazada por los descendientes del fundador de Colonia Médici, quienes deciden impulsar un proyecto de revalorización del patrimonio histórico, cultural y productivo que revierta el estado de abandono del paraje, permita recuperar las memorias colectivas locales y dinamice cultural, económica y socialmente a una de las regiones de mayor productividad láctea en América Latina.
Hoy en Colonia Médici, a través del turismo rural y de las actividades propuestas por el Museo Interactivo del Queso, se busca rescatar el patrimonio material e inmaterial de criollos e inmigrantes que le dieron vida a la “Pampa Gringa”.

La pulpería fue la primera edificación que se erigió en la zona a fines de siglo XIX. Funcionaba como proveeduría, peluquería y convocaba a gringos colonos, peones rurales y a algún que otro matrero que, desde la caída del sol, se acercaba a tomar unas copas.
Durante los primeros años del siglo XX, en una de sus salas, comienza a funcionar una escuela que luego se traslada al actual edificio.
Desde los 70, Lili Leissarrague de Scattolini comienza a desempeñarse como “bolichera” y es quien recibe a los parroquianos de la zona que se acercaban a tomar unos tragos y a jugar una partida de naipes.
En el año 2000, este espacio se convierte en Pulpería-Museo y en sus salones se realizan eventos culturales y sociales.
En 1905 se crea la escuela Gregoria Matorras. Durante los primeros años las clases se dictaban en el viejo boliche, en un salón contiguo a la pulpería y a la peluquería.
En diciembre de 1934, Ángel Médici, dona un terreno al Consejo Escolar de Santa Teresa (Totoras) y se construye el edificio actual.
Durante la década del 80, se convierte en una Escuela Experimental con orientación agrotécnica. Además de la enseñanza básica se brindaban conocimientos sobre la actividad agropecuaria. La escuela contaba con un director, 4 docentes, un ingeniero agrónomo, una cocinera y personal de maestranza. Dos estancieras trasladaban a los alumnos que vivían en un radio de 20 kilómetros.
Actualmente concurre al establecimiento educativo un número reducido de alumnos producto de la emigración rural.
La parroquia María Auxiliadora se gesta en la década del 50. Ángel Médici cede un terreno para su emplazamiento y una comisión, conformada por mujeres, desarrolla diversas acciones con el propósito de concretar la construcción del edificio. Una de las actividades más importantes, que permitió concretar este objetivo, fue la realización, en 1953, de un remate de 70 vaquillonas donadas por los vecinos de la zona. El dinero obtenido en esa oportunidad permitió afrontar los costos necesarios para finalizar las obras y dar lugar a su inauguración en 1955.
Desde entonces, la parroquia ha sido testigo de innumerables ceremonias religiosas y ha convocado a fieles de la región que, en el mes de septiembre, participan de la procesión que se realiza en honor a la patrona del agro, Santísima María Auxiliadora.
El 13 de junio de 1947 se constituye una comisión directiva que funda el Club Atlético La Suiza, en un predio de 5 hectáreas. Las domadas, los encuentros deportivos y los típicos bailes de campo eran los eventos que más asistentes convocaban.